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Nos alegra anunciar la tercera entrega de nuestra sección «Te están llamando, es un libro» en la Librería Social. En esta ocasión, recomendamos «El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes» de la talentosa escritora moldava Tatiana Tibuleac. El equipo de voluntariado de la Librería Social de la Fundación Juanjo Torrejón ha preparado esta sección con gran dedicación, buscando destacar este rincón especial que nos permite no solo fomentar el amor por la lectura, sino también recaudar fondos esenciales para nuestros proyectos sociales. Queremos que la lectura sea accesible para todas las personas y que este espacio sea una fuente de inspiración y apoyo a nuestras iniciativas.


«Este es un libro de la escritora moldava Tatiana Tibuleac, y a pesar de lo sugerente del título, no nos cuenta una historia de playa y verbena ni de desidia veraniega, sino una espeluznante historia familiar. Es la historia de un chico, Aleksy, que literalmente odia a su madre, hasta el punto de desear su muerte. ¿Cómo en su opinión no se va a odiar a una madre fea, gorda, mal arreglada y estúpida? Odia incluso que sus ojos sean de un color verde precioso, unos ojos que no se merece.

Madre e hijo pasan un último verano juntos, que es el último porque ambos saben que ella sufre una enfermedad que la matará en pocos meses. Esas semanas son el tiempo que Aleksy necesita para recuperar la relación perdida con su madre, para comprender y perdonarse, para desandar el camino del odio y el olvido.

Se reirán con ganas de la proximidad de la muerte, a la que esperan sin saber cómo podrán vivir el día de después. Se mirarán de frente uno al otro. Se cuidarán. Por increíble que parezca, descubrirán que se quieren. Tanta fragilidad hará resaltar aún más esos ojos verdes, como esmeraldas en el mar, como los tallos de los girasoles sobre los que se tumban para hablar de la muerte.

Quizá el mejor mensaje de este libro es que hay muchas cosas que tendríamos que intentar arreglar, incluso aunque sepamos que no tienen arreglo. Es la única forma de encontrar la pequeña paz que nos ayuda a seguir adelante.

Si puedes, vuelve a abrir este libro unos meses después de haberlo leído. Quizá te parezca que el texto ha cambiado y que ya no trata sobre la familia, las turbulencias entre madres e hijos ni sobre el odio o el perdón. Es posible que ahora puedas descubrir una auténtica historia de amor, de un amor difícil y complicado. Un amor de los que dejan tal huella que nadie la podrá borrar jamás.”

Puedes leer la anterior recomendación pinchando en este enlace.

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Rraiz, voluntario de Fundación Juanjo Torrejón